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“Cualquier proceso de adopción de nuevas tecnologías acumula una serie de factores que lo empujan hasta que la curva de crecimiento se torna exponencial”. Con esas palabras describe lo que viene sucediendo con el uso de insumos biológicos en la agricultura el gerente general de Koppert Argentina Fabián Diaz, quien proyectó para los próximos tres a cinco años una duplicación del mercado de biológicos en el país, pasando de 110 a 200 millones de dólares.
Lo hizo durante una reunión con periodistas en la que se anunció la alianza estratégica de Koppert, una empresa dedicada a la protección y nutrición biológica de cultivos, y Acadian Plant Health, una firma canadiense de ciencia y tecnología bioestimulante con 40 años de experiencia. El acuerdo consiste en la distribución en el mercado local por parte de Koppert de dos productos elaborados por Acadian. Se trata de Stingray y Envigro, ambos bioestimulantes en base de extracto del alga marina Ascophyllum nodosum, que es exclusiva de la zona intermareal del Atlántico Norte en Halifax, Canadá.
“Stingray para cultivos extensivos y Envigro para cultivos intensivos y frutales, se destacan por tratarse de una mezcla compleja de compuestos bioactivos sinérgicos que contribuyen a un mayor desempeño fisiológico y nutricional permitiendo a los cultivos alcanzar su máximo potencial de rendimiento”, explicó durante el evento Joaquín Sosa, Business Development Manager Cono Sur de Acadian.
Entre los beneficios de estos productos enumeró la promoción del desarrollo radicular, la absorción de agua y de nutrientes, el aumento del vigor de la planta, la mayor tolerancia al estrés, el estímulo del potencial genético, la productividad y la calidad.
Ambos productos llegan a un mercado en franca expansión. Según datos mostrados por Díaz, el mercado de biológicos en el mundo viene creciendo 15 por ciento anual. “Argentina viene en un proceso de despegue”, ilustró el gerente de Koppert, y detalló que actualmente el 75 por ciento de los biológicos usados en el país son explicados por el tratamiento de semillas, el 15 por ciento por el rubro de bioestimulantes y biofertilizantes y un porcentaje menor por los bioinsecticidas y biofungicidas. Pero aseguró que estos en los próximos años van a adquirir una importancia distinta a la que venían teniendo, y para argumentarlo mencionó nada menos que al principal problema sanitario de la última campaña agrícola. “La experiencia brasilera nos demuestra que la chicharrita se puede manejar con una serie de acciones conjuntas, pero siempre incluyendo a un biológico en esa estrategia”, remarcó.
Según la proyección de Díaz a 3 o 5 años, además del crecimiento total hasta los 200 millones de dólares, el tratamiento de semillas, los bioestimulantes/bioefertilizantes y biofungicidas/bioinsecticidas se repartirán el mercado de biológicos prácticamente en tercios.
Es en ese contexto que Koppert el año pasado lanzó 5 productos y creció 65 por ciento en facturación, y este año proyecta lanzar otros 5 productos nuevos entre los que se incluyen los dos de Acadian.
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